Se inician los balances tras fin de la COP28: Greenpeace asegura que acuerdo apunta a "falsas soluciones" y que persiste deuda por financiamiento

La COP28 llegó a su fin y con ello se inicia la etapa de los balances. De acuerdo al texto de la declaración del encuentro, se insta a los países a abandonar los combustibles fósiles en sus sistemas energéticos, pero habrían quedado dudas respecto a lo logrado.

Estefanía González, coordinadora de campañas en Greenpeace, comentó este miércoles lo resuelto en el encuentro.  A su juicio, el texto de acuerdo contiene una señal que la industria temía muchísimo: "incorporar un lenguaje que habla sobre una transición energética, aumentando la eficiencia energética y la capacidad de energías renovables, pero también con una vía que vaya lejos de los combustibles fósiles".

"Esto se da luego de una presión histórica que habían hecho más de 130 países para que la COP acordara que se debía eliminar progresivamente el uso de combustibles fósiles para poder precisamente cumplir con el Acuerdo de París y mantener la temperatura del planeta en 1,5º", sostuvo. Sin embargo, reconoció que el texto de acuerdo "dejó varias lagunas", ya que -según explica- "apunta a falsas soluciones y en la práctica permite que varios países puedan seguir en una senda de emisiones que no son lo que el mundo necesita".  

Por lo tanto, añade, "es una agenda de emisiones que no está alineada con lo que el mundo necesita. Tenemos que recordar que estamos ante una crisis climática y ecológica sin precedentes, por lo cual necesitábamos una señal muchísimo más fuerte, sobre todo considerando que fueron muchas las personas, países, y movimientos que estaban exigiendo algo más ambicioso de esta Cumbre de Cambio Climático y que también diera respuestas en el nivel que requiere la crisis planetaria y el cambio climático y eso no ocurrió".

Para González, otro de los temas clave es que todavía hay una deuda pendiente por parte de los países desarrollados respecto del financiamiento: "Es necesario que las naciones que son las responsables de la mayor cantidad de emisiones movilicen recursos financieros hacia los países en desarrollo para que puedan efectivamente acelerar la transición energética".

Según detalló, Chile logró tener un liderazgo en términos regionales muy importante, principalmente sobre la eliminación de los combustibles fósiles y también en apuntar hacia mayor ambición climática. "¿Qué es lo que pasa y lo que le ocurre a muchos países? Es que esa ambición climática que Chile pregona en el escenario internacional se tiene que ver reflejado en la política local y le tiene que hacer sentido a todas y todos los ciudadanos, y verse reflejado en la política pública. Y en ese sentido, a Chile le queda un largo camino por recorrer y particularmente a este gobierno que se comprometió con un montón de cosas. Debemos trazar una ruta de abandono del carbón al 2030, y no condenar hasta el 2040 a las personas a seguir siendo contaminadas en las zonas de sacrificio", recalcó. 

En esa línea, apuntó a la necesidad de hacerse cargo de que Chile ha estado dentro de los rankings de 10 países más afectados por el cambio climático y la estrategia climática de largo plazo habla de un plan de gestión de cuenca al año 2030, cuando la crisis hídrica es real y se está atravesando hoy.

Y sentenció: "Tenemos que avanzar en la protección de nuestros ecosistemas claves para enfrentar el cambio climático: estamos hablando de nuestros océanos, de nuestros bosques nativos, de nuestros humedales, y en esto hay muy poco en la política local. Por eso, si bien Chile tuvo un rol muy importante a nivel internacional, necesitamos que se parta por casa y que esa política se vea traducida en mejoras concretas. Uno, para frenar las emisiones de contaminantes que son tóxicos para quienes viven en las zonas de sacrificio, y dos, en la protección de los ecosistemas que nos ayudan a enfrentar de mejor manera el cambio climático”.